La pesca en kayak de mar es una práctica deportiva en auge. A pesar de que tiene más de 3.000 años de antigüedad, ha sido en esta última década cuando esta modalidad de pesca ha adquirido mayor protagonismo a nivel internacional. Con origen en la cultura esquimal, el ‘ka i ak» (hombre barca), es una actividad que actualmente no conoce fronteras y se practica con el mismo nivel de popularidad en todos los rincones del mundo. Un estilo de pesca con una serie de características muy particulares que te presentamos en este post para que puedas disfrutar de esta actividad acuática con todas las garantías de éxito y seguridad.
¿Cómo garantizar tu seguridad al pescar en kayak?
De las pequeñas barcazas que construían los esquimales con huesos de reno, madera y pieles de foca, se ha evolucionado hacia sofisticadas embarcaciones hidrodinámicas cuyo diseño ligero, compacto y ergonómico ofrece una gran maniobrabilidad al palista que va sentado en el interior.
Son los kayaks modernos, una versión muy particular de la piragua tradicional desde la que se puede practicar la pesca en el mar de manera cómoda y segura. La pesca en kayak de mar es una actividad deportiva accesible para todo tipo de navegantes y con unas sencillas nociones de navegación, algo de práctica y los materiales apropiados, se puede pasar una jornada muy divertida en el mar.
Con independencia del tipo de pesca en kayak que practiques (de fondo, a curricán o a spinnig) las medidas de seguridad que no deben faltar en tu salida son:
- Chaleco salvavidas con silbato y elementos luminosos.
- Traje isotérmico transpirable durante la pesca nocturna.
- Un dispositivo electrónico para comunicarte con tierra (teléfono móvil o VHF portátil).
- Protección solar (gafas de sol polarizadas, gorra o sombrero, crema protectora…).
- Luces homologadas (para ver y para señalar tu posición durante las salidas de pesca nocturna).
¿Cómo se pesca en kayak?
10 consejos para pescar en kayak
1. Aprende a navegar. Parece un consejo bastante obvio, pero son muchas las personas que se aventuran a este tipo de prácticas sin tener conocimientos de lo que supone dirigir una embarcación en el mar. No hace falta ser un gran navegante para disfrutar de esta experiencia, pero sí es muy importante saber reconocer la dirección de las corrientes, del viento o de la deriva a fin de garantizar desplazamientos más rápidos y seguros. En cualquier caso, no debes salir con tu kayak de mar si el viento sopla con una fuerza superior a los 14 nudos o si se registran olas de más de 1 metro, ya que podría resultar peligroso.
2. Siempre que vayas a salir, informa. Lo más recomendable es que nunca salgas solo (especialmente si se trata de tu primer contacto con este tipo de actividad). Pero en el caso de que decidas hacerlo, no olvides dejar a alguien al corriente de tu hora de partida y del itinerario que tienes previsto seguir.
3. Amóldate a cada escenario. El éxito de tus capturas no dependen únicamente de tu destreza como palista o pescador sino de tus conocimientos del área de navegación. Utiliza los señuelos o sebos que sean más acordes a la zona en la que pescas. Esto te permitirá atraer a los peces de dimensiones más atractivas, esto es, a tu principal objetivo en el mar.
4. Elige bien tu zona de fondeo. Evita riesgos innecesarios escogiendo con criterio el lugar en el que te conviene detenerte. Para ello, debes emplear un equipo completo de fondeo que te permita medir la profundidad del agua y fijar con firmeza tu embarcación evitando que esta vuelque como consecuencia de las olas, las corrientes o un repentino tirón de tu presa.
5. Ten siempre presentes las señales de seguridad. Existen varias maneras de comunicar que te encuentras en apuros, desde los 3 pitidos fuertes y cortos con tu silbato, hasta levantar el remo con las dos manos simulando que portas una bandera (la pala). Cuando un buque detecte la presencia de un remador en una situación comprometida, emitirá 5 pitidos cortos para alertar del problema.
6. Asegúrate de que te ven. Uno de los factores clave de una salida segura es que estés visible en todo momento. No es casualidad que los kayaks sean de colores llamativos. Pero además, deberás incluir en tu equipo y en tu vestuario elementos de seguridad reflectantes o fluorescentes, sobre todo si vas a moverte por zonas de mucho tráfico marítimo.
7. Mejor acompañados. Aunque una jornada de pesca en solitario puede ser muy reconfortante, cuando se sale en kayak siempre es más seguro tener compañía. Además, el apoyo de otros pescadores es muy valioso cuando se trata de ‘batallar’ durante largo tiempo con una gran presa.
8. Piensa en qué quieres pescar. Si persigues grandes presas tendrás que adaptar a ellas tu material de pesca. Haz una puesta a punto de tu equipo antes de salir de casa: comprueba los frenos de los carretes, asegúrate de que los anzuelos están bien afilados, afianza bien los nudos y llévate las cañas más apropiadas (de al menos 9 kilos para peces grandes).
9. No hay presa hasta que no llegas a la orilla. No te dejes llevar por la emoción del momento: pescar es batallar contra la presa y eso puede demorarse más de lo que imaginas. Aunque la pieza esté ya embicherada y embarcada, hasta que no pises tierra firme debes mantenerte alerta en todo momento. Los grandes peces pueden tener mucha fuerza hasta el punto de poner en riesgo la seguridad de tu embarcación. Si los llevas a casa para consumir, asegúrate de que está muertos cuando los metas en el kayak porque cualquier coletazo podría hacer que perdieras estabilidad.
10. No salgas con prisa. Lo divertido de la pesca en kayak es disfrutar del momento y del contacto con la naturaleza. Si ya eres un pescador experimentado, sabrás que este tipo de actividades requieren de mucha paciencia. Y si aún te estás iniciando en el tema, no tardarás en descubrir que lo más atractivo de la pesca en kayak es dejar que el día avance a su ritmo mientras te dejas deleitar por todo lo que te rodea.