Si has hecho alguna travesía relativamente larga, seguro que más de una vez mientras estabas en cubierta disfrutando de la brisa acariciándote el rostro, del silencio, de la calma… te ha sorprendido un chillido que te descoloca, sobre todo la primera vez, en que la incertidumbre te conduce a pensar que algo no funciona bien. Teléfono en mano para llamar a tu seguro de barcos, y reacción ¡delfines! Tu cara cambia repentinamente y dibuja una sonrisa ante la bienvenida de estos grandes nadadores que os acompañan haciendo las delicias de grandes y pequeños.
Barcos y delfines en alta mar
Cuando una manada de delfines se acerca a un barco, lo más normal es que adopte una actitud juguetona, casi de exhibición, y son frecuentes las peripecias para llamar nuestra atención; también suelen acercarse a la proa y navegar delante de nuestro barco, actividad que pueden hacer durante bastante rato aunque se estén desviando de su ruta inicial.
La acrobacia más deslumbrante que podrás ver es cuando el delfín decide sacar todo su cuerpo fuera del agua y baila sobre su cola durante varios segundos: se trata de un espectáculo increíble ¡y parece que ellos lo sepan! Los saltos y piruetas también te dejarán con la boca abierta, sin duda. Y qué decir de los más pequeños, estarán encantados.
Pese a lo que pueda parecer, hay muchísimos puntos en los que podrás maravillarte con la presencia de estos animales mientras navegas.
En el Mediterráneo puedes cruzarte con ellos sin demasiadas complicaciones, solo necesitas alejarte lo suficiente de la costa y verás cómo, antes o después, aparecen con sus piruetas y juegos para haceros compañía durante un rato. La especie más común es el delfín mular, muy sociable e inteligente, que puede alcanzar los 6 nudos de velocidad. Pero también podrás cruzarte con delfines listados y de calderón gris.
Pero no solo aquí podrás disfrutar de estos increíbles animales, a lo largo de todo el litoral e incluso en las Canarias te sorprenderán con su presencia y te regalarán sus fantásticas actuaciones en el mejor entorno posible, el mar abierto. Y no solo delfines, también podrás ver otros cetáceos como los rorcuales.
Las mejores zonas para navegar con delfines
Aunque hay muchos lugares de nuestra geografía donde podrás cruzarte con ellos, te destacamos tres en los que su presencia es especialmente importante.
#Gran Canaria
Aquí podrás ver más de 25 especies de cetáceos: delfines moteados, mulares, listados, calderones tropicales… Las corrientes y el océano son el factor clave de la presencia de estos animales en este punto, y desde luego tanto si vas con tu propio barco como si alquilas uno podrás vivir esta experiencia única junto a tu familia.
#Cap de Creus
Lo que más abunda en este punto de la zona catalana son los delfines mulares, que te sorprenderán con su gran inteligencia. No te pierdas sus impresionantes saltos y presta atención a cómo se comunican entre ellos e incluso con vosotros.
#Golfo de Vera
La costa murciana es uno de los pocos puntos de Europa donde pueden avistarse cetáceos: delfines, pero también ballenas piloto, cachalotes y rorcuales. Si navegas entre Cabo de Gata y Cabo de Palos, será difícil que no te cruces con alguno.
Ten en cuenta que esta es la puerta del Mediterráneo, y es por aquí por donde pasarán todos los animales acuáticos que quieran entrar o salir del océano. Sin lugar a dudas, es un punto clave en el que decidir pasar unos días navegando para gozar de la compañía de estos increíbles animales.
El comportamiento de los delfines en el agua
Los delfines son animales sociales por naturaleza y disfrutan de la compañía de otras especies. Muchos dicen que estos comportamientos sirven para que los delfines más jóvenes vivan una experiencia de aprendizaje muy importante para ellos, porque les sirve como actividad para mejorar su agilidad, su velocidad y la comunicación con los compañeros.
Los delfines son animales extremadamente inteligentes, con una capacidad cerebral parecida a la nuestra, y muy curiosos e inquietos: tal vez sea este el motivo que los impulsa a acercarse a las embarcaciones con las que se cruzan. Esto no deja de ser una forma de exhibirse hacia su propio grupo, mostrando las habilidades de cada cual. No olvidemos que su comportamiento social también es muy complejo.
Eso sí, por mucho que nos guste su compañía, ten en cuenta que estos animales están en su hábitat natural y no debemos molestarlos con nuestra presencia. ¡Lo mejor para disfrutar de la naturaleza es no interferir en ella!