La Costa Brava es parte de la costa de Girona y va desde el sur en Blanes, técnicamente se inicia en la roca de Sa Palomera, hasta el norte en Portbou. Son más de 200km de costa cuyas aguas no dejan indiferente a quien las conoce. Por eso, la Costa Brava en velero es una de las rutas más emblemáticas para navegar en verano.
Su nombre ya nos avisa de los que encontraremos: una costa rocosa y abrupta así como un mar cambiante, con fuertes vientos y corrientes locales. En gran parte, es gracias a esta condición que la Costa Brava sea uno de los lugares más espectaculares donde poder navegar y disfrutar del mar en la Península.
Para navegar por la Costa Brava podemos navegar a vela o motor, es decir, usar tanto velero como lancha, teniendo en cuenta las particularidades de cada tipo de embarcación. El velero nos ofrecerá además de la posibilidad del traslado entre una y otra cala con la opción de aprovechar los vientos locales y disfrutar de una travesía a vela en un marco bellísimo, como es la costa que estamos navegando. En este sentido, si optamos por un velero podemos decir que el encanto en sí no es el ir de un lugar a otro, sino el disfrutar del viaje. Por otro lado si optamos por una embarcación tipo lancha obtendremos mucha mayor velocidad y eso nos permitirá poder ver más calas en menos tiempo. No tendremos la harmonía de la navegación a vela pero sí que podremos disfrutar de la inmediatez del transporte a motor. Elijamos lo que elijamos, algo imprescindible para estos dos tipos de embarcaciones es dejarlas listas y saber cómo prepararlas para la temporada de verano.
En la Costa Brava encontraremos una gran red de puertos perfectamente equipados para el atraque de la embarcación y con todos los servicios pensados para el turismo, de forma que la oferta gastronómica, cultural y de ocio está perfectamente prevista para satisfacer todas nuestras necesidades.
Vale la pena visitar los puertos de la Costa Brava ya que son puertos que en su mayoría conservan un particular encanto con la pesca tradicional y al formar parte de sus núcleos urbanos. Nos trasladan, con todos sus matices, a ese paisaje de primer cuarto del siglo XX que nos describe Josep Pla en su obra.
A través del portal Ports de la Generalitat de Catalunya podemos ver y consultar todos los puertos públicos disponibles. También tenemos disponible el portal de la Associació Catalana de Ports Esportius i Turístics que nos ofrecen distintas ofertas para poder amarrar en sus puertos, se puede consultar aquí.
Lugares recomendados de la Costa Brava
Si tenemos previsto navegar por la Costa Brava es recomendable preparar una ruta, y para ello te recomendamos visitar:
- Blanes: Cala Sa Forcanera. Una fantástica cala que no es accesible desde tierra, por lo que tienes garantizada la privacidad y la poca ocupación de la cala. Está justo debajo del jardín botánico.
- Tossa de Mar: Porque también tenemos que divertirnos. En la costa de Tossa encontrarás toda la marcha posible además de un entorno natural maravilloso que te cautivará.
- Santa Cristina d’Aro: Cala del Senyor Ramon. Una fantástica cala de arena fina que tiene un aspecto silvestre y con aguas turquesas ideales para la práctica del snorkel.
- Calella: Illes Formigues. Frente la playa de Calella nos encontramos con un pequeño archipiélago, solamente visible si no hay mala mar porque al ser tan bajo con mala mar no es visible, así que máxima precaución al acercarse allí. Es un excelente punto de submarinismo.
- Begur: Cala Aiguablava. Arena fina y agua transparente, ¿qué más se puede pedir?
- Estartit: Illes Medes. Imprescindible. Reserva marítima formada por siete islas y varios islotes con un excepcional fondo submarino. No dejes pasar la oportunidad de conocerlo.
- Roses / Cadaqués: Cala Jòncols. Una espectacular cala virgen enmarcada en un acantilado con un espectacular fondo ideal para la práctica del buceo.
Esto es solo una pequeña recomendación, lo fantástico de recorrer la Costa Brava en velero es que nos ofrece múltiples rincones donde poder apreciar la coloridad de sus aguas, los contrastes de paisajes entre arena, rocas y vegetación así como el disfrutar de sus vientos y calmas. Como su nombre indica, es una brava costa en la que nos sentiremos más cercanos a la naturaleza cuando naveguemos por sus aguas.